Y si la renuncia de Harry a la
familia real fuese lo mejor para la monarquía inglesa? Ha sido muy
mal gestionada para la imagen de Harry y Meghan, pero la institución
se ha visto reforzada.
El
príncipe Carlos quería una reducción de la familia real y
probablemente como padre no estaba en su cabeza apartar a su hijo
menor, pero el paso de Harry ha sido beneficioso para sus planes.
Ha
tapado el escándalo del príncipe Andrés, la prensa ha dejado de
hurgar en los asuntos turbios del duque de York.
La
reina Isabel ha salido reforzada, ha dado a su nieto lo que
solicitaba sin dañar a la monarquía.
El
príncipe Guillermo y su mujer, la duquesa de Cambridge han visto su
imagen fortalecida.
El
príncipe Carlos ha conseguido lo que buscaba, la familia real queda
reducida a la reina, el heredero, Carlos, la esposa de éste, la
duquesa de Cornualles, su primogénito, el príncipe Guillermo, la
duquesa de Cambridge y sus nietos, George ( tercero en la línea de
sucesión a la corona), Charlotte y Louis.
Los
que quedan en peor posición son Harry y Meghan ( duques de Sussex).
El cuarto poder, la prensa los tacha de malcriados y consentidos.
Ellos ya han perdido la batalla de la opinión pública, y Harry ha
demostrado que es así, al revelar su terapia para superar la muerte
de su madre. El príncipe ha sacado la figura de su madre, la
princesa de Gales, parece con la intención de recuperar a la opinión
pública.
El
problema que parecía se ceñía sobre la corona inglesa ha acabado
por revelarse una suerte. Es cierto ya no controlan a Harry y a su
esposa ( tampoco es que tuviesen el control sobre ellos cuando pertenecian a la institución), pero ya no son un problema. Ellos se ha excluido de la
institución.
El
príncipe de Gales tiene la remodelación que buscaba, no ha
necesitado dar ningún paso, como si han tenido que hacer la Casa de
Borbón en España, donde Felipe VI redujo la familia real a sus
padres, esposa e hijas, excluyendo directamente a sus hermanas, las
infantas. Carlos XVI Gustavo de Suecia excluyó a sus hijos menores y
a los descendientes de éstos.
Harry
ha estado mal asesorado en sus pasos. Y ahora debe elegir si quiere
hacer verídico que lo que le molestaba era la prensa, no su papel,
que inevitablemente era secundario dentro de la monarquía, el mismo
que nunca entendió su tío, el príncipe Andrés. Puede quedarse en
una segunda línea o convertirse en la estrella e intentar eclipsar
desde fuera a la monarquia. Curiosamente fue lo que eligió su madre,
la fallecida princesa Diana. Si opta por lo segundo, las cosas se le
van a complicar y mucho. La prensa inglesa no persona a Harry.
Esta
semana que otra casa real, la de Luxemburgo, se veía inmersa en una
situación parecida a la de Harry y Meghan. El gran duque Henry,
también hizo público un comunicado para defender a su esposa de la
prensa. Es un asunto el de la gran duquesa Maria Teresa de Luxemburgo
y la duquesa de Sussex con paralelismos. A Maria Teresa de Luxemburgo
se la señala como la culpable de los problemas de personal del
palacio ducal, lo mismo le ha sucedido a Meghan Markle, si bien a
otro nivel, con el personal a su cargo, a Meghan no le hicieron una auditoria. Harry y Henry salieron ambos
en defensa de sus esposas.
La
suposición que la monarquía inglesa se ha visto liberada no parece
descarriada.